ME DIRIJO A VOSOTROS
Si cubrís con éxito el tiempo de vida terrenal para vuestra alma, entonces la muerte tampoco os asustará más sino la recibiréis como una puerta de entrada a la vida eterna. Porque entonces la vida real os espera primero, os espera una actividad feliz en compañía con almas de ideas afines, y podréis trabajar en luz y libertad, en fuerza y en el reconocimiento más completo. Entonces la muerte será superada también para vosotros, y en la contemplación de Dios seréis felices. Debéis haber alcanzado la madurez del alma …. Y esta solo podéis lograr cumpliendo los mandamientos de Dios, a través de una vida en amor a Dios y al prójimo.
Por lo tanto, solo debéis esforzaros por estar al lado de vuestros semejantes en necesidades espirituales y físicas, debéis darles amor y no perder un día en el que no hayáis hecho al menos una buena obra, entonces os formáis cada vez más para amar y estáis cada vez más llenos de la fuerza de Dios, Que ahora también vuelve su amor más hacia vosotros, porque el amor siempre enciende el amor y vosotros os asimiláis a la naturaleza primordial de Dios hasta que Él pueda atraeros hacia Él, hasta que os hayáis unido con Él y ya no podréis separaros de Él nunca más, porque el amor ata un lazo inquebrantable entre Padre e hijo que nunca querréis soltar.
La vida real solo comienza con la muerte del cuerpo, porque toda envoltura se cae de vosotros, sois libres y permanecéis libres y ahora viviréis en la eternidad ….
Amén